En Poética del cine, el director Raúl Ruiz reflexiona sobre los conceptos de proximidad y resonancia que se dan entre películas. Ruiz sugiere que ningún film es único, autónomo o completo. “Cuando vemos una película cualquiera, nunca la vemos completamente… En cada versión que vemos vive, vegeta la versión que no veremos.” Cada film llega (a las pantallas y a nuestras mentes) poseído por los fantasmas no solo de uno, sino de muchos otros films, tanto reales como imaginables. Algunos de estos films co-existen con el que estamos viendo (proximidad), quizás porque comparten el mismo tema, estilo o género; otros films co-insisten (resonancia): esto es lo que experimentamos, como espectadores, cuando percibimos una asociación que hace chispa.
En nuestro trabajo como ensayistas audiovisuales—extrayendo, remezclando y remodelando fragmentos de films—seguimos el rastro de esas proximidades y resonancias. El proceso puede tomar la forma de una comparación poética, como en Phantom Carriage (2021), donde yuxtaponemos el modo en que dos directores muy distintos—Georges Franju y Krzysztof Kieslowski—ponen en escena una situación similarmente melancólica que sucede en el transporte público.
A veces, la comparación es más inesperada: en At That Very Moment (2018), tomamos The Smiling of Madame Beudet (Germaine Dulac, 1923)—una comedia surrealista de costumbres burguesas— y Nosferatu (F. W. Murnau, 1922)—un clásico del cine de terror—para construir la historia paralela de dos mujeres que se encuentran atrapadas en un sueño lúcido.
La conexión entre los films puede ser una cuestión de influencia directa: cuando David Cronenberg realizó The Brood (1979), sin duda había estudiado The Birds (Alfred Hitchcock, 1963). En Shapes of Rage (2015) analizamos ambos films mediante la doble pantalla para explorar cómo los dos directores dieron forma cinematográfica a poderosos y complejos sentimientos de ira.
Frecuentemente, sin embargo, la afinidad entre los films es más misteriosa: algo en el aire de la cultura global los une. En The Holy Family (2017), exploramos cómo, en Francia y en los Estados Unidos, los primeros trabajos de Philippe Garrel y David Lynch— Le Révélateur (1968) y The Grandmother (1970)—exhiben el mismo tipo de pensamiento psíquico-mítico.
Otra película de Lynch, la épica Inland Empire (2006), parecería no guardar ninguna relación con Smiley Face (2007), la comedia stoner de Greg Araki. Pero—tal y como revelamos en nuestro irreverente One Hell of a Ride—al examinarlas en detalle resulta que—contra todo pronóstico— ambas comparten la misma trama… También puede ser una única escena, acción o gesto lo que hace saltar la chispa entre dos obras: en Dumb City (2019), la combinación de The Patsy (Jerry Lewis, 1964) y la serie de televisión The OA (Zal Batmanglij & Brit Marling, 2016-2019) nos lleva a una ensoñación de cuerpos cayendo y universos que se disuelven… A veces examinamos un solo film en profundidad para revelar el modo en que desarrolla sus estructuras y temas. Este es el caso de Death-Drive (2016), dedicado a The Girl on a Motorcycle (1968); y Fearful Simmetry: Sight and Touch (2018), sobre Manhunter (Michael Mann, 1986).
Nuestros ensayos audiovisuales están interesados en lo que los teóricos han llamado la intertextualidad del cine. Nuestro principal objetivo es participar en un acto lúdico de montaje creativo: recombinar las imágenes de un film con los sonidos del otro; sugerir intrigas narrativas entre películas; encontrar y trazar motivos compartidos más allá de las fronteras individuales de trabajos supuestamente autosuficientes.
El historiador del cine Jay Leyda proclamó que, en un sentido bastante literal, “los films engendran films”. Es decir: nos dan material que puede ser siempre reutilizado, recontextualizado y reinventado. En la era digital, el ensayo audiovisual nos ofrece su propia vía para poner en práctica esta idea.
PROXIMIDADES Y RESONANCIAS
VIDEOINSTALACIÓN DE ENSAYOS AUDIOVISUALES
Museo de Bellas Artes de Asturias
10 al 20 de marzo
ANÁLISIS CREATIVO EN EL ENSAYO AUDIOVISUAL
CHARLA DE CRISTINA ÁLVAREZ LÓPEZ Y ADRIAN MARTIN
Museo de Bellas Artes de Asturias
12 de marzo, 18h